lunes, 12 de febrero de 2018

LO IMPORTANTE ES SER FELIZ


Si algo tiene ser una blogera semanal es la escasez de temas que te inspiren. Es mi perfecta excusa para la escucha de conversaciones en mesas ajenas. Pero hay semanas como ésta, en que el calendario te lo pone fácil y puedes hablar de San Valentín. Obviamente todo el mundo sabe ya a estas alturas eso del cura que casaba parejas por estas fechas. Los más cínicos también sabemos que esta fiesta está creada para acabar con las sobras de stock de los regalos de Navidad. Aunque hay que reconocer que se lo han currado. He visto cosas terribles en los escaparates. La ropa interior roja, los cojines en forma de corazón y las chorradas varias ocupan estos días la calle y se han creado expresamente para el 14 de febrero. Así que eso de los excedentes ha quedado ya anticuado.
No voy a hablar de esta parte. Voy a hablar de ciertas curiosidades relacionadas con el día de los enamorados, que han llamado mi atención.
Siguiendo la estela del pasado post vuelvo a oriente donde en Japón se celebra el “Tanabata” o “Fiesta de las estrellas”. No es el 14 de febrero, sino el séptimo día del séptimo mes  del calendario lunisolar, creo que eso aquí caería más bien en agosto. Eso es porque muestra cierto paralelismo con la fiesta china “La noche de los sietes” (Qi Xi, imaginadme pronunciándolo con mi estupendo acento mandarín).
Resumiré la historia: una tejedora (en algunas versiones es una princesa que teje telas maravillosas) y un pastor enamorados hasta tal punto que la pobre tejedora se me despista y empieza a desatender sus obligaciones. Naturalmente, es castigada por los dioses, como debe ser en cualquier buena leyenda que se precie. Pero siguen tan enamorados que se les permite verse una vez al año. De noche. El puente por el que se encuentran está hecho de estrellas en Japón y de Grullas en China. Hay tantas versiones de la historia como gente la ha explicado.
Hoy en día, en China se celebra el día de las habilidades y las jóvenes muestran su gracia al coser. En Japón tienen una tradición que me parece preciosa y es que escriben deseos o poemas en tiras de papel y los cuelgan de los árboles de bambú.
Pero no todo es folklore y leyendas. En Japón que son así como bastante listos  y no quieren desperdiciar una fecha tan importante como San Valentín, ese día las mujeres regalan chocolate a los hombres. ¿Y por qué? Pues porque resulta que uno de los patrocinadores/impulsores de esta fiesta es la marca de chocolates Morozoff de Kobe. Un mes después, en el “White Day”, son los hombres quienes agasajan a las mujeres con regalos de color blanco, generalmente chocolate blanco. Cosa que encuentro una injusticia, porque he probado los bombones japoneses y los de chocolate negro son infinitamente superiores.
En otras partes del mundo se celebran cosas distintas como en Perú donde suele haber bodas colectivas, en Finlandia se celebra el día de la amistad, en Dinamarca se envían textos graciosos firmados por tantos puntos como letras tenga el nombre del autor y hay que adivinar la identidad del mismo, en caso de acertar te ganas un huevo de chocolate la próxima Pascua; en Italia las mujeres deben levantarse al amanecer para cruzarse con su próximo esposo que será el primer hombre que se crucen por la calle. Por suerte aquí no es así, yo suelo ir al gimnasio antes del amanecer y puedo asegurar que a esas horas, no tienes humor para pensar en esas cosas.
Aquí nos dedicamos más a leer “memes” divertidos sobre San Ballantine’s y en mi caso a consolar a las niñas y niños de 12 años que no han recibido ninguna postal con corazoncitos. En serio. Preocupante.
De todas maneras no quiero parecer tan cínica (os aseguro que no lo soy) y os animo a que celebréis lo que queráis, el amor, la amistad o el momento. Lo importante es ser feliz, gran frase que me han dicho esta mañana. Tendría que dejaros con la canción más romántica del mundo, pero como cada uno tiene sus referentes pondré una canción de amor que me gusta y punto. Así que con un videoclip muy icónico y la estremecedora voz de Nina Simone me despido hasta la semana que viene. Enamorados o no, sed felices. Es una orden.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

EL CREADOR DE DISTOPÍAS

  Tengo un amigo que ama las distopías. Escribe sobre ellas y parece que todo lo analiza con precisión quirúrgica, cuando lo imagino delante...